La AMI se une a la Conmemoración del Día Internacional del Migrante.

 

Existen fechas para conmemorar batallas, victorias, sucesos…, entre otros, y el motivo es que resulta necesario llamar la atención sobre cuestiones que, aunque están siempre bajo los focos, no detallan sus matices ni sus sombras.

 

El Día de la persona Migrante es uno de esos, una fecha que recuerda el deber y la corresponsabilidad de todos los países, las entidades, y del conjunto de la sociedad civil en general en la protección de los Derechos Humanos de las personas migrantes sin importar su condición y en resaltar y valorar la contribución que la migración aporta al desarrollo, tanto en los lugares de origen como de destino.

 

La migración es una realidad histórica y forma parte de la esencia misma de la humanidad, es por ello por lo que términos como “xenofobia”, entendido como el miedo o rechazo a lo extranjero o extraño y “racismo”, como la creencia de que una raza es superior a otra, no tienen cabida en un entorno globalizado, en un mundo cada vez más interconectado y en donde la tolerancia y el respeto deben primar como consecuencia de la educación, de la empatía y de la conciencia de igualdad entre los seres humanos.

 

Conociendo el papel primordial que tiene la contribución de la comunidad migrante en el mundo, la Association Miraisme International ha visibilizado las enormes vulnerabilidades y dificultades con que se encuentran las personas sin importar su condición (edad, sexo, religión) o su lugar de origen, tránsito o destino, especialmente respecto al difícil acceso a servicios básicos que ponen en riesgo su inclusión efectiva en la sociedad.

 

Para la AMI, los procesos de implementación del Primer Pacto Mundial para la Migración, deben garantizar el acceso de las personas migrantes a los servicios digitales de las administraciones públicas, sin ampliar las brechas digitales actuales, sino mejorando la calidad de los servicios prestados y reduciendo los tiempos de espera, que en ocasiones, pueden agravar el estatus jurídico y social de las personas migrantes, por lo que es necesario formular políticas públicas y programas que garanticen la inclusión digital, incorporando como actores en estos procesos a los representantes de la sociedad civil, y en particular, a las organizaciones de personas migrantes.

 

Desde la Association Miraisme Interntaional, conmemoramos esta fecha especial y renovamos nuestro compromiso para continuar realizando contribuciones que redunden en el mejoramiento de la calidad de vida de la comunidad migrante dentro de un marco de seguridad jurídica que garantice la protección de sus derechos a escala local, nacional, regional e internacional y la inclusión efectiva de las personas migrantes y sus familias, sin dejar a nadie atrás.